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Spam es cualquier email que envíes a alguien que no te haya dado permiso directo para ponerse en contacto con él sobre el tema del email.
Cuando envías un email a alguien que no conoces, eso es un email “no solicitado”. Enviar un mensaje no solicitado a alguien obviamente no es spam, pero cuando envías un email no solicitado a toda una lista de personas que no conoces, entonces sí es spam.
Para enviar un email a alguien, necesitas tener su permiso. Esto puede hacerse a través de:
• Un formulario de suscripción a una newsletter por email en su página web.
• Una casilla de aceptación en un formulario. Esta casilla no debe marcarse por defecto, la persona que complete el formulario debe seleccionar voluntariamente la casilla para indicar que quiere recibir noticias de usted.
• Si alguien completa un formulario en papel, por ejemplo una encuesta o se registra en un concurso, usted solo puede ponerse en contacto con esta persona si se le ha explicado que podría ponerse en contacto con él por email Y esta persona hubiera marcado una casilla indicando que le gustaría que se le contactase.
• Clientes que le hayan realizado alguna compra en los últimos 2 años.
Usted no puede importar ni enviar correos a ninguna dirección de email:
• Sobre la que no tenga permiso explícito y demostrable para contactar en relación al asunto del email que usted está enviando.
• Que usted haya comprado, alquilado o adquirido de alguna otra forma a un tercero, sin importar lo que este alegue sobre calidad o permiso. Usted debe obtener el permiso para sí mismo.
• Con la que no haya contactado por email en los últimos 2 años. El permiso no envejece bien y estas personas han podido cambiar su dirección de email o no recuerdan haber dado su permiso en primer lugar.
• Que haya tomado o haya copiado y pegado de la web. Solo porque la gente publique sus direcciones de email no significa que deseen recibir noticias de usted.
Toda newsletter que usted envíe por medio de MailerLite debe incluir un enlace de un solo clic, claro y visible, de cancelar suscripción, que elimine inmediatamente al suscriptor de su lista. Una vez que hayan cancelado la suscripción, usted debe dejar de enviarles las newsletters, salvo que se suscriban de nuevo.
Nos reservamos el derecho a suspender su cuenta inmediatamente y a comenzar la investigación de su actividad, si sus campañas tienen un alto porcentaje de quejas por spam (más del 0,2%), rebotes (más del 5%), cancelaciones de suscripción (más del 1%) o una tasa de apertura muy pequeña (menos del 3%). Si se descubre que usted ha estado enviando emails sin permiso, se cancelará su cuenta. Podemos pedirle que demuestre que tiene permiso de los destinatarios, pudiendo cerrarle la cuenta si no tiene dicha prueba. De lo contrario, activaremos su cuenta y usted podrá utilizar el servicio de nuevo.